Agua Potable

El agua es un elemento indispensable para la vida, como vemos lleva toda una serie de mecanismos  de como la podemos encontrar en la naturaleza. Cubre casi cuatro quintas partes de la superficie terrestre y en el hombre representa aproximadamente el 70% del peso total de su cuerpo.

Así que independientemente del uso que se le da al agua, el más importante es el de su consumo personal, lo cual se refleja en la salud humana, depende está no sólo de la cantidad, sino también de la calidad que ella tenga.

El agua que se emplea en abastecimientos públicos o privados ha estado prácticamente expuesta en su totalidad a ser contaminada, sea al fluir en la superficie, en las corrientes o al infiltrarse a través del suelo. Para la calidad del agua de abasto han sido perjudiciales, el crecimiento desmedido de la población y el uso cada día mayor de los ríos como canales de arrastre de desechos.

Según cifras de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) en México, tan sólo el 25% de las aguas residuales son tratadas;  es decir, no se descontaminan 3 de cada 4 litros de agua. Más alarmante aún, tanto aguas tratadas como no tratadas se descargan a ríos y lagos de manera directa sin ningún proceso de purificación. De acuerdo a una evaluación de 478 cuerpos de aguas superficiales, se encontró que 70  de éstos (14.65%) están contaminados, y 11 (2.30%), se encuentran altamente contaminados. En México, la industria y la agricultura son las responsables de la mayoría de los contaminantes.

El 25% de los ríos, lagos y embalses que monitorea la Conagua son de buena calidad, en tanto que en el 75% restante, el agua tiene diferentes grados de contaminación. Los principales contaminantes son: materia orgánica, nutrientes (nitrógeno y fósforo) y microorganismos (coliformes totales y coliformes fecales), pero hay otros como los metales y los derivados de hidrocarburos, que se presentan en áreas con actividad industrial, según datos de la Conagua.

Lo más alarmante de estos datos son la cantidad de niñas y niños que mueren debido a aguas contaminadas. Se calcula que en el mundo cerca de 3,900 fallecen diariamente a causa de enfermedades curables transmitidas por el agua. Por ello debemos trabajar, en conjunto contribuyendo desde nuestras casas, a evitar la contaminación del agua y a reutilizarla, impidiendo su desperdicio.